¿Qué son los rebotes hard y soft de Mailchimp? Email Márketing

Rebotes hard y soft: qué te indican

Mailchimp es una de las principales herramientas con las que cuentas para hacer email marketing. Por eso, es fundamental que conozcas adecuadamente todos sus elementos y que te manejes bien con su lenguaje, para que puedas sacarle el mayor rendimiento.

Los rebotes hard y soft son esenciales como parámetros y métricas en esta herramienta y te los queremos explicar.

¿Qué son los rebotes en el email marketing?

Los rebotes hacen referencia a que un correo que querías enviar a una determinada dirección no ha podido ser entregado.

Es decir: que se estrella contra el muro y se devuelve, de ahí la expresión.

Los rebotes «Hard»

Los rebotes duros o hard se entienden como aquellos en los cuales existe una razón permanente por la cual dicha cuenta de correo no podrá recibir nunca envíos.

Causas

Esto puede deberse a diversas causas.

• La más evidente es la de que dicha cuenta no existe. Es decir: que se ha escrito mal o que se ha aportado una dirección falsa.
• No obstante, también pueden ser otras como, por ejemplo, que dicha cuenta haya bloqueado tus envíos. Esto puede provocarlo una publicidad demasiado intrusiva que haya terminado por agotar la paciencia de ese usuario.
• También puede deberse a tener la bandeja de entrada repleta, pero, en este caso, se trata de una opción mucho menos común.

¿Qué sucede cuando sufres un rebote así?

Principalmente, la plataforma elimina ese correo al que han sido enviados y se apunta en la sección de los limpiados para tu próximo envío masivo. Es una manera que tiene la plataforma de asegurarse de que no envíes spam o publicidad demasiado insistente a los usuarios.

Los rebotes «Soft»

Son aquellos en los que un correo que quieras enviar no puede llegar al destinatario a causa de que esa dirección de correo está inhabilitada temporalmente.

Por ejemplo, el caso anteriormente citado de que el correo está lleno suele encajar mejor aquí, con la diferencia de que si a los tres días el correo no se vacía, podría contar como un rebote de tipo duro.

Habría muchas otras causas que podrían explicar este suceso, por ejemplo, que la cuenta estuviese sin funcionamiento debido a un fallo informático por un tiempo. Otro elemento en el que también cabría fijarse sería en la posibilidad de que el email fuese demasiado largo. Puede que hayas añadido una gran cantidad de datos o elementos que hagan imposible que éste llegue a su destino.

Un email entra en base soft

¿Qué sucede cuando un email que has enviado entra en base de rebote soft? Pues principalmente habría una fase de tres días en la que se intentaría hacer llegar ese correo al destinatario. Así, si se trata de errores temporales se suelen solucionar rápidamente, por ejemplo, durante una campaña.

Pero imagínate que en sucesivas campañas esa misma cuenta sigue generando problemas y es imposible hacerle llegar un correo. En este caso lo que sucedería es que pasaría a considerarse como un rebote duro.

Se estima que el paso del suave al duro se produce de media después de haberse producido un total de quince rebotes de tipo suave. Por lo tanto, hay margen para considerar el problema como definitivo.

Conclusión del rebote hard

Mailchimp ofrece múltiples funcionalidades, pero, evidentemente, hay elementos que no puede controlar. En cualquier caso, si en tus campañas empiezan a aparecer este tipo de rebotes, esto indica que es hora de actualizar tu base de datos y, también, la posibilidad de que tus mails sean demasiado pesados o que parte de tu público no esté ya interesado en recibirlos.

En conclusión, el rebote hard es un excelente indicativo sobre el trabajo que realizas en tu campaña de email marketing: una buena manera de guiarte por una ruta mejor.